Un poco de historia. La Fotografía y el Mundo del Arte.

A mitad del siglo XIX había muy pocos fotógrafos en cada gran ciudad del mundo, pero ya se había instalado en todas las más importantes academias de arte y pintura una guerra encarnizada: los pintores, quienes habían vivido durante siglos de los encargos que les eran hechos, en su mayoría o totalidad pinturas o dibujos de escenas naturalistas que reproducían la realidad, se vieron desplazados laboralmente por los fotógrafos, quienes comenzaron a recibir tales encargos de modo masivo y repentino, ya que ese nuevo medio, la fotografía, era más veloz y más preciso en cuanto a reproducir la realidad, su perspectiva, sus proporciones y sus detalles.

La amargura y los insultos -por parte de los pintores- no se hicieron esperar, y buscaron por tanto tales desplazados artistas -por un interés económico principalmente- tildar a la fotografía de no-arte, intentando así mostrarse tales pintores, como una opción comercial superior a lo fotográfico, ante sus clientes.

Este detalle histórico, el temor del pintor ante las capacidades expresivas del fotógrafo, y el consecuente mecanismo de defensa de los pintores, buscando modos para hacer ver inferiores estéticamente a los fotógrafos, es uno de los hechos fundamentales del inicio de la historia de la fotografía.

En los 1850’s los materiales fotográficos son aún fabricados a mano por el fotógrafo, un personaje inusual aún dentro de la sociedad, y entre muy complejos y extensos procesos que exigen la pericia del trabajo en laboratorio, el fotógrafo es siempre un científico que debe saber a fondo sobre óptica, química y mecánica. En París, ya en los tiempos de las aventuradas y muy atrevidas posturas estéticas de los jóvenes y aún rechazados impresionistas, el fotógrafo francés Nadar elabora su obra, retratos principalmente, y con su visión inusualmente psicologista de los retratados, logra un hito: que las academias de arte y los críticos digan a partir de los 1860’s, con unanimidad y por primera vez, que la fotografía sí es arte.

Por supuesto la discusión no terminó del todo en todos los ámbitos, pero la fotografía dejó de ser considerada un simple acto mecánico y de reproducción de la realidad, y se aceptó mundialmente que el fotógrafo es un creador que, en lugar de reproducir la realidad, elabora una visión personal de la realidad, y que está capacitado para expresar esa realidad de muy diversos modos, los cuales dependen únicamente de su intención creativa. La fotografía fue considerada primero un espacio para la belleza, y después un espacio para el concepto y para lo interesante: fue así parte de la evolución del arte.

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